En mi habitación albergo a un par de los "relegados": aquellos mishos que, por alguna extraña razón, no congenian con los demás gatos. Roxie y Bristol son las que conviven conmigo a diario. Saskia y Miranda también viven ahí, pero es mientras deciden dónde se sienten más cómodas. Jack gusta de pasar ahí la mayor parte del día y de la noche. Bobby me visita muy seguido, así como Cosmo (aka Pirinolo) y Cooper (aka Gusanito). Y Kelly parece que decidió abandonar el baño y mudarse aquí.
Las otras relegadas (Almendrita, Carmela, Milka, Cindy y Mindy) viven en el taller, y ahí tienen una ventana donde pueden admirar el patio trasero. Y aunque yo tengo una ventana más pequeña, quise hacer lo mismo para que puedan entretenerse un rato.
2 comentarios:
Las ventanas suelen ser lugares muy entretenidos, pasan cosas que se mueven, además de tener todo controlado desde aquel privilegiado punto de observación.
Saludos felinos.
Debería ser un derecho felino. ¡Exijo a la presidenta una ventana por gato de este país! :D
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