McKenzie

"¡Doña Diana, doña Diana!"

Nuevamente escuchábamos el temible llamado de nuestras vecinitas. "Oh, oh", dijimos, "y ahora ¿qué nos traerán?"

Con cierto temor salió Lida a la puerta a atender a las niñas y, como yo me lo temía, entró con un bicho.

Una gatita de pelaje muy similar al de Bristol venía en los brazos de Lida. Sin embargo, esta minina ya estaba algo crecidita. Calculamos que ya habría pasado los 6 meses porque ya había mudado colmillos, pero... al parecer estaba "cargada".

Como siempre, acudimos a nuestro super veterinario de confianza quien coincidió con nosotras en la sospecha: era posible que estuviera en una fase inicial de embarazo. Nos sugirió que la lleváramos nuevamente a la siguiente semana para reconocerla y nos dijo que cuando calculara que tuviera 4 semanas le sacaría rayos X para ver cuántos y en qué estado venían los gatitos.

Al principio yo no estaba muy emocionada y hasta era de la idea de operar a la gatita inmediatamente. Pero Irwing nos dijo que ya no se podía realizar una cirugía porque el embarazo ya había avanzado lo suficiente como para no poder intervenir de esa manera.

Anyway... yo también terminé por emocionarme con la llegada de nuevos gatitos. Incluso comencé a elaborar una caja especial para que, si la gata quisiera "encuevarse" tuviera la opción de poder hacerlo cómodamente. También le compramos una cama nueva y algunas toallas para el feliz momento.

Andábamos hechas unas castañuelas y acudimos a la cita de reconocimiento a la siguiente semana. Irwing no había llegado pero Javier, el veterinario adjunto comenzó a reconocerla mientras el otro llegaba.

Sin embargo, Javier estaba muy extrañado porque no sentía a "los productos". Cuando Irwing llegó y palpó a Mac también quedó extrañado ya que tampoco sentía a los gatitos. Nos dijo que le daría una semana más y si en ese tiempo tampoco sentían nada habría que hacerle cirugía exploratoria a la gata para ver qué era lo que tenía.

Pues llegó la semana y con ella la cirugía y resultó que... ¡nada! ¡Lo que tenía McKenzie era una buena emposmada! Lo cual era evidente porque hasta la fecha nos quejamos de sus cagadas diarreicas!!!

Claro que al operar a la misha se aprovechó y la esterilizaron. Pero a partir de ahí, sus apodos fueron "McShit" y "Macaca", ya que lo que tenía en la panza era pura ídem.

También aprovecho reclamarle por mis gatitos, ya que ella llegó prometiendo unos gatitos y nunca llegaron.